Probablemente, si piensas en una frenada impresionante, tu mente viaje directamente a un circuito. Pero, en la realidad, los frenos son igual de fundamentales en la alta competición que en el día a día. Especialmente si utilizamos la moto para movernos por la ciudad. Un entorno conocido, que recorremos cada día, pero en el que pueden surgir todo tipo de imprevistos ante los que tenemos que saber reaccionar de la mejor manera posible.
Para muchos, las ciudades son verdaderas junglas. Mucho tráfico, combinado con el ritmo acelerado que suele dominarlas y sumado a las distracciones comunes que se producen cada día. Una unión de factores que provoca más de un susto a los motoristas, que, como bien sabrás, no siempre somos fácilmente visibles para el resto de los usuarios de la vía.
Cuando se produce uno de estos sustos, ya sea porque otro vehículo se cruza en nuestra trayectoria o porque aparece un peatón de la nada, entra en acción una vieja conocida: la frenada de emergencia. Una maniobra que realizada de la manera correcta y con unos frenos en buen estado puede salvarnos de una fea caída. Pero… ¿Cómo podemos estar seguros al realizarla? Desde NG BRAKES, te ayudamos a responder esta pregunta.
- Tener la moto a punto, como siempre, es fundamental. Con una máquina cuidada y con todos los sistemas en perfecto estado, podemos tener la confianza de que reaccionará tal y como deseamos. Siempre debes estar seguro de que los discos de freno están en perfecto estado y, si muestran alguna señal de deterioro, cambiarlos cuanto antes.
- Conocer tu moto. Es importante que estemos familiarizados con nuestra montura. Y que practiquemos las frenadas en una zona segura, sin tráfico, como puede ser un circuito de seguridad vial, un parking vacío, etc.
- Utilizar el freno trasero combinándolo con el delantero. En una frenada de emergencia, en ciudad o fuera de ella, no dejes toda la responsabilidad al freno delantero, pues podría bloquearse la rueda y sufrir una caída.
- Como siempre, practica la conducción preventiva. Debes estar atento al entorno, dejar una distancia suficiente de seguridad con el resto de vehículos y evitar frenar sobre zonas deslizantes, como señales viales o alcantarillado.